La importancia de la formación del personal
Para una empresa, invertir en formación significa ganar competitividad.
En cualquier empresa que quiera sostener o aumentar su competitividad dentro del mercado, la formación es necesariamente un recurso del que es posible tener una ventaja competitiva sobre sus competidores.
La formación motiva y recompensa a los recursos humanos, que ven con buenos ojos la intención de la empresa de invertir en la trayectoria formación-profesional de sus empleados, y tiene implicaciones positivas en tres aspectos:
- Ayuda a adquirir conocimientos y habilidades;
- Llena posibles vacíos dentro de la empresa;
- Potenciar y descubrir talentos.
Un proceso de formación de personal consta de 4 etapas:
- El análisis de las necesidades
- La planificación e impartición de formación;
- La evaluación del proceso;
- La revisión del proceso de formación.
Analizando las necesidades
Antes de buscar formación para su empresa, es conveniente intentar comprender cuáles son sus necesidades reales de formación. ¿Cómo? Mediante un análisis que involucra a la empresa en todos los sectores / departamentos, primero recoge toda una serie de información sobre la visión de la empresa, tendencias de mercado, competidores, organización, luego destacando los márgenes de mejora, identificando así las principales áreas de intervención.
Estrategia de capacitación
A partir de la información recopilada en el análisis, es fundamental la planificación de todo el proceso de formación: contenidos, métodos, tiempos y criterios de evaluación.
Proceso de capacitación
Tras la formación, es recomendable que la empresa se encargue de evaluar su eficacia o no, comprobando que los conocimientos y habilidades adquiridos se han transformado en acciones concretas que, a medio-largo plazo, han repercutido positivamente en la propia empresa.
Proceso educativo
Al contrario de lo que algunos podrían pensar, la fase de evaluación no marca el final del proceso de formación. A esta fase le sigue quizás la más importante de todas las demás, a saber, la fase de revisión. De hecho, es a partir de lo que surgió durante la evaluación que una empresa tiene la oportunidad de revisar y repensar intervenciones posteriores y / o cursos de capacitación para mejor, entendiendo dónde estuvo mal, si estuvo mal y, de ser así, cómo remediarlo y los errores cometidos.
Por último, no olvidar pensar en la importancia de los idiomas, con la premisa de que no se pueden hablar todos los idiomas del mundo, el idioma inglés es, o más bien debería ser, común a todos los directivos. También teniendo en cuenta el número de habitantes que lo hablan, mientras que el chino o el ruso depende mucho de las tareas que se desarrollan en la empresa y de la orientación de la propia empresa. Aunque no existen estadísticas precisas, se estima que la habilidad de hablar inglés con fluidez no es una habilidad tan habitual. Las multinacionales extranjeras (la mayoría de hablantes nativos angloamericanos) ciertamente han dado un impulso a la penetración del idioma inglés entre sus empleados en las oficinas españolas.
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